Esta prenda, aunque parezca algo que no lleva más de 100 años, estais muy equivocados!!. Su origen se remonta en la antigua Asiria (S. XIX a. c.). Es decir que xa “Choveu de carallo”
El chal se puede hacer en variedad de colores y con distintos acabados, como en forma de V, cola de dragón, punto araña, punto jazmín, puntada fantasía, etc…, y según la elección, el tipo o modelo, se puede hacer para llevarse en invierno o verano.
Se considera una prenda elegante y seductora para llevar a fiestas, ceremonias, bodas, bautizos o como algo común para casa (por ejemplo, para cuando se está viendo la tele en el sofá).
Se puede decir que actualmente el Chal se ha convertido en un elemento femenino universal para llevar como complemento multiusos. Se puede llevar encima de los hombros, como chaqueta, pañuelo, bufanda o falda, y me atrevería a decir que es un elemento imprescindible para el armario de tu dormitorio.
Se podría decir que es un complemento “camaleónico” por la variedad de usos. ¿Verdad?
Tanto es así, que estamos apuntando gente para un curso donde aprenderán de la mano de una profesional a realizar preciosos chales!!
Siguiendo unos patrones a ganchillo o con horquilla, aprenderás a realizar gran variedad de modelos.
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Te dejo unas muestras de lo que se puede hacer, para que te hagas una idea: